El planeta de los simios (francés: La planète des singes) es una novela distópica escrita por Pierre Boulle, publicada por primera vez en francés por la editorial Julliard en 1963. Como su título indica, trata sobre un planeta en el que los simios y no los humanos son la raza dominante.
En 1968 fue adaptada al cine en la película “El planeta de los simios” de Franklin J. Schaffner. El impacto de la película generó numerosas secuelas, series de televisión, un remake, un reboot y varias series de cómics cada vez más alejados de la obra original. Por otra parte, el éxito de la franquicia también propició la fama de la novela de Pierre Boulle.
El argumento de la novela de Boulle, narra una época en que los viajes interplanetarios están a la orden del día, una pareja de enamorados cruza el espacio en plena luna de miel. Durante su viaje, encuentran una botella vagando por el espacio, con un pergamino en su interior. En dicho pergamino, el periodista Ulises Mérou narra su historia.
En el año 2500, Mérou acompaña al Profesor Antelle, a su ayudante Levain y al chimpancé Hector en un viaje espacial hacia la estrella Betelgeuse, situada en el Cinturón de Orión. Una vez alcanzada la estrella deciden explorar uno de sus planetas en órbita, Soror. Allí descubren una civilización compuesta por simios: chimpancés, gorilas y orangutanes. La raza humana, en cambio, vive en estado salvaje, como si de animales se tratara. Tras perder a sus compañeros, y ser capturado en una partida de caza, Mérou deberá demostrar a sus captores que no es un animal, sino un ser civilizado. Para ello, será ayudado por la Doctora Zira.
Su autor Pierre Boulle (Aviñón, 21 de febrero de 1912 – París, 30 de enero de 1994). Después de terminar sus estudios se marchó a vivir a Oriente. Se alistó en el ejército, combatiendo durante la Segunda Guerra Mundial en China, Birmania e Indochina. Tras la guerra, se fue a vivir a Malasia y, finalmente, regresó para instalarse definitivamente en Francia. Es autor de las novelas “El planeta de los simios” y “El puente sobre el río Kwai”. Pese a ser un escritor de vocación tardía, tuvo grandes criticas y fue galardonado con el Premio Sainte-Beuve (1952), Gran Premio de la Novela (1953), Óscar al mejor guion adaptado (1957), Gran Premio de la Sociedad de hombres de letras de Francia (1976).