Lou Ottens (Bellingwolde, 21 de junio de 1926 – Duizel, 6 de marzo de 2021) falleció a los 98 años. Creador de las cintas de casete, que revolucionaron la música doméstica en los años 60 del pasado siglo.
Mostró su interés por la tecnología muy joven durante la ocupación de Holanda por los nazis en la Segunda Guerra Mundial. Construyó una radio para escuchar la radio «holandesa libre» Oranje con una antena especial que llamó «Germanenfilter» (filtro de alemanes), porque podía esquivar los inhibidores nazis, señaló el diario NRC.
Posteriormente, Ottens entró a Philips después de estudiar ingeniería en la universidad, donde él y su equipo crearon el primer magnetófono portátil, según la compañía. Luego perfeccionó el sistema e inventó el casete en 1962, cuyo primer prototipo era de madera. «El casete se inventó por la molestia que causaba el magnetófono existente, es así de simple«, dijo Ottens en una entrevista.
Lou Ottens fue el director del equipo que comenzó el trabajo de creación del cassette a principios de los años sesenta dentro de la empresa Hasselt, propiedad de Endhoven Philips. En 1963 se presenta el invento dentro de la feria IFA de Berlin y se comienza con su fabricación en serie en Alemania.
En 1965 empieza su comercialización en Europa. En Estados Unidos no llega hasta 1969 cuando la discográfica The Mercury Record Company, propiedad de la propia Philips, encarga una primera tirada de cuarenta y nueve títulos en formato casete.
En los años 50 ya existían cintas magnéticas, pero abultaban mucho, los reproductores eran enormes y era complicado colocarlas en el reproductor, se rompían con facilidad. Lou Ottens desarrolló una cinta de casete de pequeño tamaño, compacta, barata y muy fácil de usar. El primer reproductor de casete se presentó en 1963, aunque no se puso a la venta hasta 1965.
Los casetes consistían en dos carretes en miniatura, cubiertos por una carcasa de plástico, por los que pasaba una cinta magnética a 4,76 centímetros por segundo. Esta contaba con dos pistas: la cara A y la cara B.
Con sus dos caras y muy fácil de utilizar, se fabricaron más de 100.000 millones de casetes en el mundo durante su vigencia desde la década de 1960 hasta la de 1980 y ha resurgido recientemente en una moda retro.
Las cintas de casete se convirtieron en el formato físico de la música comercial y casera durante más de 30 años, hasta que en los años 90 fueron sustituidas por el CD. El CD acabó con el liderazgo del casete y los vinilos.
Sin embargo, Ottens también formó parte del equipo que desarrolló el CD. En este caso, se trataba de una creación conjunta realizada por las empresas Sony y Philips en 1982.